Dos vascos y un catalán. Un catalán y dos vascos. Y la Plaza de la Catedral de Barcelona. De entrada, con esos ingredientes, ya pinta interesante…Allí, justo en el penúltimo año del siglo pasado se pone en marcha Bilbao Berria , un satélite que aterrizó en ese lugar para ofrecernos lo mejor de la cocina vasca. La culpa pues, la tienen esos tres personajes. Unos apasionados de la cocina.
Con los años, también se han posicionado en Londres, para dar bien de comer a esos ingleses, que a veces no saben lo que es bueno. Peor nosotros nos centramos en Barcelona. En Bilbao Berria y básicamente, en la cocina de los pintxos.
Porque ahora todo el mundo se atreve con los pintxos. Pero no todo lo bautizado como pintxo es realmente un pintxo. Puede haber pintxos sin palillo, pero no es el caso, pues aún sería más difícil controlar cuantos se ha comido cada comensal, que todos tenemos nuestro punto de «pillería». Un bocado es un pintxo. Dos bocados son un pintxo. Más de eso ya pasa a ser otra cosa. Por tanto. Pequeño bocado para acompañar una bebida. Creo yo. Y casi siempre, como es lógico, sin tenedor, sin cuchillo, sin cubierto.
En Bilbao Berria podemos encontrar también platos más completos de la amplia cocina del país, que en esto somos unos hachas. Buena carne, deliciosos pescados y recetas de guisos sin complicación, en un establecimiento bonito y luminoso, donde casi todo nos entra por los ojos y nos produce un deseo espectacular. Uno de los restaurantes preferidos de Tony Alemany, propietario de Los Vikingos en Sitges. De hecho, el nos lo recomendó. Y de eso, entiende un poco. Si tenéis oportunidad, probadlo, y comprobad si estáis de acuerdo..
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